Mantener la motivación en equipos de desarrollo
Mantener motivados y comprometidos a los equipos de desarrollo debería ser una prioridad clave para cualquier empresa del sector. Sin embargo, con frecuencia estas compañías fallan en nutrir la pasión y el crecimiento profesional de sus talentosos ingenieros y programadores. Tengo historias cercanas donde mis compañeros han tomado trabajos en los que inicialmente les venden una idea y terminan haciendo algo diferente o algo repetivivo, lo que finalmente termina en un abandono.
La rutina inesperada
Entre historias se descubren cosas interesantes, por ej. un buen amigo consiguió un trabajo de tiempo completo en una empresa (la cual no recuerdo su nombre), al empezar estaba emocionado y creía fielmente que tendría nuevos retos y aprendería de los demás en su equipo, pero lejos de los desafíos que imaginaba, se encontró atrapado en tareas repetitivas y carentes de innovación y un equipo con poca comunicación. Su situación no es única, ya que, otro amigo, enfrentó una realidad similar tras ser contratado para liderar una importante migración de sistemas que nunca ocurrió, y terminó revisando un sistema bastante viejo donde su trabajo se basó en corregir errores; básicamente fueron engañados o les prometieron una idea que nunca pasó.
Tras la pasión por innovar
Estos talentos no buscan solamente un trabajo, buscan un espacio donde su pasión por crear y resolver problemas complejos pueda florecer. Anhelan proyectos innovadores que expandan sus habilidades, no rutinas que los limiten. Cuando esta motivación no se alimenta, decae su compromiso y finalmente termina en un desencanto que los hace renunciar.
Por qué las empresas caen en la indiferencia
Diversos factores pueden promover este estancamiento. Algunas empresas temen innovar y perturbar su zona de confort. Otras se pierden en excesiva burocracia y procesos anticuados. La falta de recursos o liderazgo también influyen. Pero el costo de la inacción es alto y lo veo constantemente en varias empresas.
Causas de la desmotivación
Existen varios motivos para esta desmotivación y algunas de esas cosas que podría listar serían:
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Falta de innovación: Trabajar constantemente con tecnologías obsoletas, sin poder explorar novedades.
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Falta de retos: Tareas repetitivas que no suponen crecimiento profesional.
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Mal liderazgo: Líderes de equipos poco inspiradores que no reconocen aportes ni impulsan el desarrollo del equipo.
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Falta de autonomía: Excesivo micromanagement y procesos que limitan la creatividad.
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Ambiente laboral tóxico: cultura corporativa negativa, política interna, recursos inadecuados.
Consecuencias de ignorar el problema
Y claro, al llegar a ese final y darse cuenta de que lo prometido no se cumplió o se cumplirá, llegan los problemas para las empresas, puesto que tendrán:
- Caídas en productividad y calidad del trabajo.
- Alto turnover, y la necesidad de reemplazar constantemente a los desarrolladores, que se traduce en tiempo y dinero perdido.
- Pérdida de conocimiento crítico al renunciar empleados clave, porque quienes se van, se llevan consigo imporante know-how.
- Estancamiento de la innovación por falta de nuevas ideas.
- Mayores costos en capacitación y reclutamiento.
y así hay muchas más razones..
Abordando el desafío
Las empresas deben reconocer la importancia de impulsar crecimiento profesional y desafíos intelectuales en sus equipos técnicos. Yo he reconocido algunas estrategias clave que pueden funcionarles, tales como:
- Reevaluar la cultura organizacional y fomentar la experimentación.
- Ofrecer oportunidades de capacitación en nuevas tecnologías.
- Establecer canales abiertos de comunicación sobre inquietudes e ideas.
- Proveer proyectos innovadores que expandan habilidades.
- Brindar reconocimiento por logros y aportes.
- Construir un entorno de crecimiento personal y profesional.
- Permitir los side-projects o proyectos alternos.
Invertir en la motivación de los equipos de desarrollo es fundamental y las compañías que se adapten y nutran la pasión de sus profesionales técnicos lograrán prosperar. Debemos recordar que detrás de cada línea de código hay una mente ávida de crecer.
Porque al final, lo que se quiere evitar es perder talento y retenerlo el mayor tiempo posible, la competencia es difícil y encontrar buenos recursos toma tiempo, así es que cuidarlos es de las mejores estrategias que pueden seguir.
Happy coding! :D